2.ª FERIA AGRÍCOLA, GANADERA E INDUSTRIAL DE TABASCO, 1930.
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2.ª FERIA AGRÍCOLA, GANADERA E INDUSTRIAL DE TABASCO, 1930.
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2.ª FERIA AGRÍCOLA, GANADERA E INDUSTRIAL DE TABASCO, 1930.

Tomado del libro «Ecos, Exposición Regional Tabasqueña. Su historia (1880-1997)».
#DeTabascoSoy Landy Aguilar Palafox.
Tomás Garrido compra una extensión amplia de tierra cerca de la ciudad. Prácticamente el Sr. Amieva, su propietario, se lo regaló. El lugar era un lomerío con grandes zarzales, en que destacaba una ceiba y varios árboles de mango; abundaban las serpientes venenosas y en la laguna había mucho lagarto, se menciona que cazaron dos enormes ejemplares cuando limpiaron para construir los campos de la exposición. (1)
Unos dicen que el nombre de laguna de Las Ilusiones se lo da Tomás Garrido, pero la versión más creíble es que se lo da el poeta José María Bastar Sasso, como Edith Matus comenta, (2) esta versión la confirman los descendientes del poeta.
Detalla Trinidad Malpica que se trabajó las 24 horas durante meses, barriendo acahuales, limpiando los jacintales de la laguna y rellenando de arena la orilla para construir un pequeño balneario al que se llamó El Corozo. Además se acondicionó un embarcadero donde se rentaron lanchitas. Se edificaron varios kioskos para la exposición de los productos agrícolas, ganaderos y artísticos de los 17 municipios del estado y pueblos, como Tamulté y Atasta. (3) Pepe Bulnes detalla que los kioskos eran vistosos:
“…simétricamente distribuidos con su planta de luz eléctrica y barquichuelos que rompían el cristal de la laguna de Las Ilusiones”. (4)
Malpica hace así mismo, una descripción de la exposición, pero confunde la fecha mencionando 1929 en lugar de 1930, que es lo correcto. Escribe que en la orilla de la laguna de Las Ilusiones:
“…se efectuó la segunda exposición regional, agrícola, ganadera, industrial y artística en la primavera del año de 1929; fue tanto el éxito alcanzado por esta fiesta del pueblo, que a pesar de que un fuerte norte estuvo azotando a la región y de los grandes lodazales que se formaban; verdaderos enjambres de hombres y mujeres sobre todo jóvenes, acudían al lugar en que se efectuó esta exposición que había de llegar a ser tradicional”. (5)
Del 5 al 12 de febrero de 1930, se llevó a efecto en Villahermosa la considerada segunda Exposición Regional Tabasqueña, en la que se concentraron los más fuertes valores económicos del estado, de la Chontalpa, de la Sierra, del Usumacinta y del Centro.
En el pabellón central de la exposición, donde se encontraba Centro, se llevó a cabo la ceremonia de inauguración a cargo del gobernador interino Isidoro María Diez (1929 a 1930), quien develó una placa conmemorativa fijada en una de las columnas centrales con el escudo socialista grabado en mármol. En él, se leía la inscripción:
“1930. Recuerdo de la Exposición Regional Tabasqueña a su iniciador Tomás Garrido Canabal. Villahermosa, Tabasco, febrero 5 de 1930″.
Se publicó un catálogo de aparatos, objetos y productos naturales e industriales presentados en la Exposición Regional Tabasqueña, en sus páginas principales se menciona que es organizada a iniciativa del Sr. Lic. Tomás Garrido Canabal, siendo gobernador constitucional del estado don Ausencio C. Cruz, con fecha de 22 de febrero de 1930. (6)
Sin embargo, el gobernador de Tabasco que inauguró es Isidoro María Diez, ya que fungió como gobernador interino del 4 de diciembre de 1929 al 27 de febrero de 1930, y la exposición fue inaugurada el día 5 de febrero de 1930.
En las páginas interiores del catálogo se publicó una foto del Hombre del Sureste con la leyenda: “Lic. Tomás Garrido C., promotor, organizador y reformador notable, que ha impulsado victoriosamente al estado por el sendero agrícola”.
Fábricas, talleres y laboratorios, presentaron sus productos en el salón central: Laboratorios Amores, fábrica de cigarros La Fama, fábricas de jabones La Perla y La Hormiga. En el área de fundición de hierro y bronce resaltó el trabajo del maestro Eurípides Heredia quien, además, mantuvo en operación una bomba que surtió agua durante toda la exposición, llevando el líquido de la laguna por más de 96 metros. (7)
Una característica de las ferias anuales era que no se vendía ni regalaba alcohol. Trinidad Malpica narra a detalle cómo eran las exposiciones y nos lleva a esa época, en la cual se mostraba lo mejor del trabajo de la mano de obra tabasqueña:
“Se iniciaban las exposiciones con un desfile de charros y chinas poblanas que salían del frente del Palacio de Gobierno. Se elegía una Mensajera del Progreso por cada municipio y una representante de la raza, todas ellas montaban magníficos caballos y eran escoltadas por los charros”.
Atrás iba el pueblo en los escasos automóviles y camiones que había entonces; pero la mayoría iba a pie, marimbas y banda de música alegraban la fiesta y el desfile. Se iniciaba el festejo a las 9 de la mañana y se terminaba a las 12 de la noche, tocando las golondrinas en todos y cada uno de los kioskos. Estaba prohibido tirar voladores y tocar música extranjera.
En la mañana había kioskos en donde se obsequiaba leche, chorote y conservas a las familias campesinas venidas de lejos y claro que se colaban muchos pobres de la ciudad. A más de los kioskos que eran construídos con motivos regionales, había docenas de arriates con flores y fuentes, los arriates estaban construidos simulando a la perfección lagartos, rosas y otras figuras decorativas y de gran belleza que estaban hechas con piedras de regular tamaño y pintadas de blanco.
Fuentes:
(1) Tabasco, sus exposiciones y su folklore. (1976) Gob. del etado de Tabasco. Op. cit. p.6.
(2) Matus de Sumohano, Edith V. (1984). Lo que el tiempo quiere olvidar. Tabasco. p. 319.
(3) (5) Tabasco, sus exposiciones Op. cit. p.6.
(5) Balcázar Antonio, Elías. (2000). Villahermosa crónicas y remembranzas siglo XX. Tabasco. UJAT. p. 319.
(6) Exposición Regional Tabasqueña .(1930). Tabasco, México. Ediciones Redención. p. 3.
(7) Torruco Saravia, G. (1992). Villahermosa nuestra ciudad, Tomo III, 1928-1934. Tabasco. H. Ayto. C. de Centro. p. 889.