El 4 de junio de 1921, se constituyó legalmente la Asociación Nacional de Charros, A.C. cuyo objetivo sería “impulsar por cuantos medios lícitos tengan a su alcance, los ejercicios físicos que tengan como base la equitación mexicana, traje, costumbres y arte nacionales, prestando al efecto todo su apoyo moral a las Asociaciones nacionales charras y propugnar su fundación”.
En 1933 se fundó la Confederación Deportiva Mexicana, y el presidente Abelardo L. Rodríguez decretó la Charrería como Deporte Nacional.
Uno de los primeros en utilizar el traje de charro en Tabasco fue el licenciado Tomás Garrido Canabal, y existen múltiples referencias a que usaba el traje de gala, así como de su afición por montar a caballo, ya que él tenía un gran respeto por todo aquello que significara tradición y nacionalismo.
Puede decirse que el primer lienzo charro en su aspecto deportivo en Villahermosa, fue el de Tierra Colorada, aunque había otros para la exposición agrícola y ganadera de Tabasco, pero eran provisionales. Aquel lienzo debe haber durado unos tres años.
Don Matías donó un terreno para hacer un lienzo por la ciudad deportiva.
En ese tiempo llegó el arquitecto Eduardo Parra Fernández, que venía a hacer unas obras para el gobierno, como el Teatro de la Universidad Juárez, la Escuela Normal Rural y la Escuela de Bellas Artes, él era una persona que había vivido en el centro de la República y conocía la vida institucional de la Charrería, ya como deporte organizado.
Él apoyó a construir el primer ruedo de palitos, donde iban a practicar los jóvenes los domingos por las tardes. El arquitecto les mostraba cómo se florea la reata.
Don Domingo Ordóñez tenía una Quinta en Tierra Colorada, y ahí también se hizo un ruedo. Don Domingo invitó al ruedo de Tierra Colorada a Carlos Madrazo, con la idea de que viera que ya había aquí gente de a caballo.
Había un terreno en el cual se acababa de hacer el Club Campestre, donde está actualmente el restaurante, que en aquel entonces era una finca que se encontraba abandonada, y ese fue el terreno que los charros dieron para hacer el lienzo y, por otra parte, el gobernador ofreció aportar lo necesario para la realización de la obra.
El arquitecto Parra realizó los planos y el proyecto, y la obra fue del ingeniero Villafuerte como director de Obras Públicas. La construcción duró menos de un año.
Se inauguró el 16 de septiembre de 1964.
Muchos coinciden en señalar la importancia que tuvo la intervención del arquitecto Parra para que se formalizara la práctica de la Charrería en Tabasco.
En Tabasco se conformó un grupo con el interés de practicar la Charrería de manera oficial y en 1964 se fundó la Asociación de Charros de Villahermosa.
Parte de los fundadores Domínguez Ordóñez Madrazo, Adalberto Tito Manzur Ocaña, Manuel y Pancho Fernández Morett, Fernando Hernández Loroño, Marcial Hernández Falcón, Pedro Pedrero Fernández, Rafael Silva Silva, Pepe y David Lanestosa López, Diego Rosique, Sergio y Jaim e Priego Fernández, Santos Cruces Escalante, Jaim e Reynés Berezaluce, José Francisco Gallegos Calcáneo, Federico Jiménez Paoli, José Osorio Cámara, Nelson Oropeza Évoli, Jorge Pintado Borrego, Carlos Pérez Dueñas, Mario Fernández Alfaro, César Fernández Sastré, Fernando Hernández Oropeza y Manrique Bravata Sosa. Inolvidables don Matías León y don Arcadio León.
Tomado de:
1.- Arellano, Quintanar Soledad; Márquez López, Javier; Paredes Blancas, Jorge; Andrade Torres, Juan (2005). Las Asociaciones de Charros en Tabasco: 40 Años de Historia. UJAT.
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