La rama es un claro ejemplo del mestizaje pues reúne las antiguas fiestas al dios Huitzilopochtli en que se adornaba una rama como símbolo de renovación, Europa aporta la religión y algunos instrumentos que se complementan con cantos afrocubanos.
Tiene su origen en la región llamada Sotavento “lugar donde azotan los vientos” y que comprende los estados de Veracruz, Oaxaca y Tabasco, aunque la rama se extiende a lo largo del litoral del golfo de México hacia la zona peninsular incluyendo Campeche, Yucatán y Quintana Roo.
En Tabasco es tradición que se pasee la rama a partir del día 16 y hasta el 24 de diciembre aunque puede extenderse hasta el día 5 de enero. Para ello grupos de niños y jóvenes cortan una rama de algún árbol frondoso la cual puede ser pintada con cal o cubierta con algodón, se adorna con elementos de papel como cintas y cadenas, pasto o barba de viejo, espirales de aluminio, vejigas o globos, esferas, cascabeles, flores, estrellas escarchadas y faroles hechos a base de cascara de naranja agria con alambre y cabitos de vela.
Los instrumentos también requieren de la recolección grupal pues se elaboran para la ocasión sonajas con aros de alambre y corcholatas, claves a base de mangos de escoba, chinchines de lata metálica con semillas o piedritas así como embaces de cristal que se percuten con una moneda.
Otro elemento que antiguamente acompañaba en los días cercanos y posteriores a la navidad era una caja (por lo general de zapatos) que lleva en su interior pequeñas imágenes de barro de la virgen maría y san José a manera de pesebre y que en la zona peninsular es sustituida por la virgen de Guadalupe.
Se acostumbra salir a partir de las 6 de la tarde ya que al caer la noche podía observarse a lo lejos la iluminación de los faroles que pendían de la rama así como a los jóvenes o niños avanzar portando en sus manos velas protegiendo sus manos con un cuadro de cartón. Al llegar a las casas se daba las buenas noches y se preguntaba si quería recibir la rama, de ser afirmativo cantaban en la puerta o por invitación de los dueños pasar a la sala en donde se encontraba el majestuoso nacimiento.
Se iniciaba con Naranjas y limas… dependiendo los estados y su influencia musical varía los versos. En los municipios de Tabasco como Jalpa de Méndez y Nacajuca se interpretaban rimas que aludían a los personajes del portal como José, maría, el buey, el gallo o la mula o incluso a san pedro con una tortuga, hacia la zona de Centla y Centro se dejaban escuchar además de los antes mencionados fragmentos de los villancicos tradicionales como la marimorena, arre borreguito o los peces en el rio que recuerdan los pasacalles tan tradicionales en España.
Finalmente se daban los versos de despedida como “ya se va la rama muy desconsolada o agradecida”, todo dependía del aguinaldo que se les daba. Así pues en las ciudades se acostumbraba a dar una moneda mientras que en las villas y poblados lo más común era que se les retribuía con frutas o alimentos como buñuelos, las hojaldras o los turuletes, de allí porque se lleva una caja o lata encintada y un morral. Con lo obtenido durante los nueve días se hacía una posada para los participantes y en últimas instancias se repartía el aguinaldo equitativamente.Hoy estas tradiciones se están perdiendo poco a poco pero ojala en próximos años podamos recuperar.