En agosto de 1924 días se organizaba a nivel nacional un concurso similar al de “Señorita México”. El periódico “El Universal” organizó el certamen llamado “Embajadora de la Simpatía”. Y aquí, en Tabasco, el diario “Redención” organizó un concurso para la “Fiesta de la Raza» que se celebraba el 12 de octubre, en el cual cada municipio elegirá una Flor de Belleza y la ciudad de Villahermosa tendría derecho a elegir cinco señoritas que representarían a la capital del Estado”.
La convocatoria ls lanzó el periódico el 1º de septiembre de 1924:
NUESTRO CONCURSO
1º de septiembre próximo abriremos
el CONCURSO DE LAS FLORES
para la fiesta de la raza el 12 de octubre.
Redención incluía en cada número un cupón recortable para emitir los votos. Pero la demanda fue mayor a la esperada y se hizo una emisión especial de 5,000 cupones para venderlos a cinco centavos cada uno. Para el 5 de septiembre la votación iba de la siguiente manera:
El 18 de septiembre la votación iba de la siguiente manera:
El 25 de septiembre de 1924, se designó el Jurado Calificador en el Concurso de Las Flores de la Raza que determinarían el fallo final y firmarían los diplomas: el diputado Alejandro Lastra, Homero Margalli G. presidente municipal del Centro; el diputado Manuel Graniel González y el diputado Ausencio C. Cruz.
La votación para el concurso “Las Flores de la Raza” se cerró el 5 de octubre y el resultado final en Villahermosa fue:
Los resultados fueron dados por el periódico Redención, organizador del evento, como definitivos, en primera plana. Pero en la última página del mismo ejemplar se avisaba que se continuaría recibiendo
votos hasta las cinco de la tarde del día ocho de octubre; y en el diario del día 10, en primera plana, como noticia principal se publicó que “ayer a las veinticuatro horas quedaron terminados los trabajos de insaculación llevados a cabo por el Jurado Calificador (…) los votos recibidos fueron:
No se anota cuántos votos obtuvo cada una de ellas. No obstante, el jurado calificador las declaró “Flores de la Raza» por Villahermosa.
Los comercios y personas que aportaron obsequios para las Flores fueron, entre otras, Rafael Andrade, Amadeo Cristiani, Carlos F. Sáenz, Benito de Diego socio propietario de “El Puerto de Veracruz”, Pérez y Cía., Rafael Molí, Luis J . Romero, E. Quintero e Hijos, Frontera Navigation Co. & S. A ., Joaquín Landero, Droguería L a Central de don Atírsipe Figueroa, Lauro Vidal y V ., Casa “Neme», Julio Mora Ascanio, Landero Hnos., Berreteaga y Cía., Juan Pizá y Cía., “La Mariposa de Oriente” .
El 15 de octubre se celebró el Baile de Las Flores de la Raza se realizó en los salones de la Liga Central con música (que habían sido inaugurados el 16 de septiembre), sidra, vino, cervezas y gaseosas. Concurrieron las Flores de varios municipios. Olga Quintero fue la ganadora del concurso de La Flor de la Raza.
El canta autor Pedro Gutiérrez vendía a $3.00 “El Cancionero Moderno” contenía canciones de muchos autores; y el álbum de “Las Flores de la Raza” a $ 10.00 con fotografías. Ambas obras se podían adquirir en la “Librería Artística” del señor Francisco Garrido y en “La Academia” de Fidias Sáenz.
Posteriormente al iniciarse los días de la exposición en 1930, de las «mensajeras del progreso», señoritas que representaban a los municipios y representantes indígenas (recordemos participaban comunidades importantes como Atasta, Tamulté, etc.), de la cual se escogía posteriormente «la flor de la raza» como un reconocimiento a la raza indígena.
En esos tiempos se le tenía un gran respeto a la raza indígena y siempre se le daba un lugar preponderante en actividades y programas; se escribía que “la Escuela Nueva que en Tabasco descansa sobre las poderosas columnas de la «Escuela Normal» y la «Escuela para Campesinas», buscando no solamente la elevación y adelanto cultural de la juventud estudiosa de las ciudades, sino también la redención de la clase campesina cultivando los pequeños cerebros de la Raza que son una esperanza de la Nación, ya que en las inmensas campiñas incultas es donde ha de nuestra riqueza. …»
Fuente:
Torruco Saravia, G. (1988). Villahermosa nuestra ciudad, Tomo II. Tabasco. H. Ayto. C. de Centro.